Síndrome de hiperestimulación ovárica

Si has escuchado hablar del síndrome de hiperestimulación ovárica pero no sabes ni qué es, ni su causa, ni síntomas, desde Estudio Médico Navarro hemos preparado este post para hablarte sobre este síndrome que está directamente relacionado con tratamientos de fertilidad.
Durante estos tratamientos se utilizan inductores de ovulación y estos inductores pueden producir una respuesta exagerada que se traduce en la aparición del Síndrome de Hiperestimulación Ovárica (SHO). Esto pasa sobre todo en los casos en los que, tras utilizar Hormona Gonadotrofina Corionica se consigue una gran cantidad de folículos maduros o si la paciente tiene un nivel alto de la hormona femenina o estradiol.
¿Cuáles son las causas del SHO?
Aunque se han realizado numerosos estudios, desde que se dio a conocer el primer caso, aun no es del todo comprensible, pero las causas de este síndrome pueden estar centradas en los niveles de hormonas que combinan, su estimulación propia con la estimulación que recibe tras inyectar el tratamiento.
Esta inyección contiene GCH que hace que el tamaño de los ovarios aumente y lleguen a producir un mayor número de hormonas que harán, junto a otras secreciones que los vasos sanguíneos sean más permanentes. Las consecuencias de esto pueden llegar a transformarse en problemas renales, el aumento del riesgo de sufrir coágulos sanguíneos o desequilibrios en los niveles referentes a los electrolitos.
No queremos que cunda el pánico, no queremos que centres tu atención en lo que viene a continuación, recuerda que cada cuerpo es mundo y que los síntomas de este, o cualquier otro síndrome o enfermedad que podamos sufrir, también son diferentes. Lo más recomendado es que, cuando notemos que algo no va bien, que algo ha cambiado, nos pongamos en contacto con nuestro especialista para que pueda realizar un estudio personalizado y aplicar un tratamiento si fuera necesario.
¿Qué síntomas tiene este síndrome?
Dentro de los síntomas mas leves, podemos enumerar la molestia abdominal, las náuseas y vómitos en ocasiones, aumento de peso y estreñimiento.
Si hablamos de los casos más graves, que suelen darse en menos casos, ya que con los primeros síntomas leves comienza a aplicarse el remedio, podemos encontrar: dolor intestinal, disminución de las veces que hacemos pis, dificultades para respirar con normalidad, aumento rápido de peso, vómitos, náuseas y diarrea.
El Síndrome de Hiperestimulación Ovárica  grave no suele darse en muchos casos, pero es cierto que cuando aparece, debe ser tratado de forma inmediata.